marzo 28, 2018

Caían indios sepultados en el vapor de la mañana........

La United Fruit Co.


Cuando sonó la trompeta, estuvo
todo preparado en la tierra,
y Jehová repartió el mundo
a Coca-Cola Inc., Anaconda,
Ford Motors, y otras entidades:
la Compañía Frutera Inc.
se reservó lo más jugoso,
la costa central de mi tierra,
la dulce cintura de América.
Bautizó de nuevo sus tierras
como «Repúblicas Bananas»,
y sobre los muertos dormidos, 
sobre los héroes inquietos
que conquistaron la grandeza,
la libertad y las banderas,
estableció la ópera bufa:
enajenó los albedríos, 
regaló coronas de César,
desenvainó la envidia, atrajo
la dictadura de las moscas,
moscas Trujillos, moscas Tachos,
moscas Carías, moscas Martínez, 
moscas Ubico, moscas húmedas
de sangre humilde y mermelada,
moscas borrachas que zumban
cubre las tumbas populares,
mocas de circo, sabias moscas
entendidas en tiranía. 
Entre las moscas sanguinarias 
la Frutera desembarca, 
arrasando el café y las frutas,
en sus barcos que deslizaron 
como bandejas el tesoro
de nuestras tierras sumergidas.
Mientras tanto, por los abismos
azucarados de los puertos,
caían indios sepultados 
en el vapor de la mañana:
un cuerpo rueda, una cosa
sin nombre, un número caído,
un racimo de fruta muerta
derramada en el pudridero. 

Pablo Neruda (1950)